Inauguración: 3 de mayo de 2012.
Cierre: 23 de junio de 2012.
El ciclo de exposiciones denominado “Contactos” busca establecer vínculos entre la obra de Pedro Figari y distintas producciones artísticas de la región. Pedro Figari no dejó discípulos, con la salvedad de sus dos años como director al frente de la Escuela Nacional de Artes y Oficios; tampoco forjó una escuela pictórica. Desde el año 1917 pintó en compañía de su hijo y colaborador Juan Carlos hasta el fallecimiento de éste en 1927, y luego se entregó a la creación en la soledad de su taller parisino y más ocasionalmente, a su regreso en Uruguay, en la casa de su hijo menor Pedro.
Las huellas que dejaron sus pinceles pueden, sin embargo, seguirse en muy variados creadores nacionales y extranjeros, ya sea por influjo directo –formal y temático– o por los lazos de una estética que trasciende la producción individual para englobar corrientes y afinidades históricas.
Juan Storm
La estancia
óleo sobre tela
89 x 109 cm
Colección Banco Central del Uruguay
Las dos primeras ediciones de este ciclo en el Museo Figari contaron con la participación de artistas uruguayos en actividad –Mirta Olivera en 2010 y Cecilia Mattos junto con Nacho Seimanas en 2011- cuyos contactos con la producción figariana se desarrollaban a partir de una intención predominantemente lúdica, desde el ensamblaje y la escultura de pequeñas dimensiones. Para esta tercera edición del ciclo, con la obra de Juan Storm (1927-1995), la conexión se establece desde la pintura y por la pintura, en el espacio figurado de la tela y el cartón. Para ello hemos solicitado en préstamo obras de colecciones privadas y públicas, tanto de Storm como de Figari, que enriquecen la propuesta museográfica de estos "contactos".
Pedro Figari Juan Storm
Pique nique La penca
óleo sobre cartón óleo sobre tela
65 x 88 cm 77 x 97 cm
Colección Museo Nacional de Artes Visuales Colección Juan Storm hijo
Storm, que nació el mismo año de la desaparición física de Juan Carlos Figari, genera una línea de continuidad con Pedro Figari gracias a una paleta y un interés temático compartidos. Esta muestra ha sido concebida, pues, como homenaje a dos pintores uruguayos que desde épocas y circunstancias vitales disímiles, comulgaron con un sentimiento afín a la naturaleza y a las tradiciones rurales, pero por sobre todo, convergieron hacia una misma pasión por la pintura.